Spain FF Spain D6: "Space Riders": partida de rol online

(Control de percepción)

 

"Hmmmm…"

 

Denith gruñe un poco, y tose...

 

Vorian se da cuenta de que Doimo ha contenido la respiración cuando ha oído el nombre de Corven Mallard. Moku continúa hablando:

"Mallard está ahora trabajando para un señor del crimen del Sector Chomell. No es empleado suyo, pero... le hace trabajos, no sé, y se ha medio instalado en el mismo planeta porque le contrata con frecuencia. Tampoco sé para qué quiere la mercancía, pero estaba dispuesto a pagar por ella. Casi no lo cuento, Doimo. Tenías que haberle visto. Creo que nunca he tenido tanto miedo de alguien antes..."

Doimo le da una palmada en la espalda y se acerca al mueble bar, comenzando a prepararle algo al zeltron.

 

Vorian se acerca discretamente a Doimo y le pregunta en voz baja "Disculpa, pero...¿Tan peligroso es ese Mallard? Por tu reacción al escuchar su nombre me ha parecido que lo conocías"

 

Doimo susurra:

"Luego os cuento más. Esto puede ser aún mejor de lo que esperábamos. Intentad sacarle toda la información que podais."

 

Vorian se dirige otra vez a Moku y sigue las instrucciones de Doimo "¿Conoces el nombre del señor del crimen?"

 

Moku sacude la cabeza:

"No, sólo sé lo que os he dicho, que es lo que se decía entre sus hombres. Corven es muy cuidadoso con sus contactos."

 

"¿Nos podrias dar el nombre de algunos de esos hombres? Tambien necesitaremos la dirección de Mallard"

 

Moku se rasca la cabeza:

"Al único que conozco bien es al lugarteniente de Mallard. Un humano llamado Fandar. Fandar Doomhammer. No sé si seguirá estando con él: oí que mencionaban algo sobre mandar a Fandar a controlar algún negocio de Mallard en otro lugar. Y Mallard vive ahora en, uh, una ciudad llamada Spinnaker, en el planeta Naboo."

Doimo está trayendo la bebida y se detiene en seco:

"Espera. ¿Me estás diciendo que Mallard está en el mundo natal del Emperador Palpatine? Diablos, Moku, Naboo es el planeta de retiro del Emperador. Es un hervidero de stormtroopers e imperiales."

"Spinnaker es una ciudad pequeña, alejada de Theed. Apenas tiene una pequeña guarnición."

"Vale. Pero antes hay que llegar a Spinnaker."

"Muchos contrabandistas lo hacen. Hablas de Naboo como si fuera Centro Imperial, y no deja de ser un mundo bastante pequeño. Cualquier Mundo del Núcleo es un hueso mucho más duro de roer..."

Moku se queda callado. Doimo suspira y se queda mirándoos.

 

"Mmm… necesitaremos que nos digas todo lo que sepas de ese Fandar Doomhammer, incluida una descripción física…"

 

"Uhm. Bueno, es un humano bastante grande de unos treinta años. Ojos negros, pelo corto, una barba que le llega hasta medio pecho. Un vozarrón profundo. Bastante... no sé, carismático; el resto de hombres de Mallard siempre le hacen caso sin rechistar. Le gusta beber y correrse fiestas, pero es un auténtico profesional. Muy astuto. No sé si es especialmente inteligente, pero tiene una especie de sexto sentido. Por lo que escuché sobre él, es bastante honorable pero capaz de ser frío y cruel con los que le traicionan."

Moku traga saliva con dificultad y bebe del vaso que le ofrece Doimo.

"...Eso seguro que lo ha aprendido de Mallard"

 

"¿Y respecto a su presencia en Spinnaker en Naboo? ¿Tiene algún tipo de operación montada allí? ¿Cómo podremos encontrarle?"

 

(Por cierto, ¿sabe Jad algo más de Naboo aparte de lo que ya se ha dicho en la conversación?)

 

"¿Fandar? No, Fandar no vive allí. Corven Mallard tiene alquilada una casa cerca de la Plaza del Comercio, pero nunca recibe a gente allí. Suele realizar todos sus negocios en una especie de sitio de... baile, donde va gente a bailar sobre un escenario. Un sitio precioso, la verdad. no muy lejos de su casa. No recuerdo cómo se llama, pero si preguntais lo encontrareis con facilidad."

 

"De acuerdo… Pero antes de embarcarnos en algo tan arriesgado, supongo que ha llegado el momento de decir lo que nos estamos preguntando todos… ¿Qué hiciste para que Mallard se enfadase de esa forma contigo y decidiese no comprarte la mercancía?" Frunzo el ceño.

 

Moku se revuelve en el sofá incómodo:

"Bueno, ehhhh..."

Se da cuenta de que le estais mirando todos y suspira.

"Katryn Mallard."

Doimo se echa a reir pero logra contenerse y recuperar la compostura. Moku la mira con ojos que suplican clemencia.

"Su padre nos... bueno, encontró en la casa de campo... uhh... bueno, no creo que sea necesario dar más detalles."

"¿Y qué pasó?"

"Me sacaron a tiros por la ventana del dormitorio. Dos pisos de caída y por suerte aterricé sobre una carreta de melones. Corven tenía una especie de... no sé, de cañón bláster de repetición pero más compacto... y comenzó a abrir fuego sobre mí mientras bramaba que me había acogido en su casa y que había violando su confianza y... y allí estaba yo, desnudo y cubierto en restos de melón, esquivando una ráfaga bláster que hacía que el pavimento saltara en pedazos a mi alrededor. Lo último que vi antes de saltar dentro de mi speeder fue que uno de sus hombres le acercaba un... un lanzagranadas..."

"Corven estaba dispuesto a... a lanzar granadas en mitad de una ciudad de Naboo porque tú..."

Moku agacha las orejas cabizbajo.

"Eso es."

"Así que te cargaste el trabajo porque..."

"Uhm. Sí."

"Vaya, esa chica debe ser detonita, ¿eh?"

"La mujer más bella que jamás he visto, Doimo. Aunque me costó el negocio y casi me cuesta la vida... en el fondo, muy en el fondo... no me arrepiento."

Moku logra esbozar una leve sonrisa y por primera vez lograis vislumbrar lo que el zeltron debe ser en su estado normal: un pícaro, seductor y caradura.

 

Me llevo la mano a los ojos y niego con la cabeza, lo que viene siendo un gran facepalm.

 

Vorian se rie y aplaude "¡Una historia impresionante!"

 

"Me alegro de que a alguien le haga gracia. Supongo que se convertirá en un clásico en cantinas de astropuerto." *suspire y sonríe débilmente* "Bueno. ¿Qué me decis? Tengo la mercancía escondida en los muelles. Seguramente podramos subirla a vuestra nave sin problemas."

 

"Yo estoy de acuerdo"

 

Doimo asiente:

"Yo también. Si nadie se opone, tendrás el dinero esta misma tarde."

 

"Yo también… Después de todo sólo es ir al planeta de retiro del mismísimo Emperador, contactar con un tipo capaz de volarte la cabeza junto con medio barrio, y tratar de venderle la mercancía sacando un buen margen de beneficio… ¿Qué podría salir mal?"

 

Doimo le da a Jad una palmada en la espalda:

"Bueno, algún día teníais que hacer vuestro primer trabajo grande, ¿no? Así es como uno se forja una reputación. Moku: tenemos que salir a hablar en privado. No le abras a nadie que no seamos nosotros, ¿de acuerdo?"

"Por eso no va a haber ningún problema."


Cuando estais fuera del apartamento y a una distancia prudencial, Doimo mira a Vorian:

"Lo que preguntabas antes: conozco a Corven Mallard. No personalmente, pero por referencias. Muchas referencias, y cada vez más. Aunque no es alguien especialmente influyente la gente que sí lo es ve un gran futuro delante suyo. Podría ser el siguiente Jorj Car'das. Estuvo dirigiendo una legión mercenaria desde antes de las Guerras Clon. No es el tipo de persona que se retira sin tener algo grande planeado. Y es el tipo de contacto que nos interesa, a vosotros y a mí. Así que... tened cuidado. No sólo porque sea un tipo peligroso -que lo es- sino porque si os congraciais con él, podría ser toda una apuesta de futuro."

Se sacude las manos sobre las perneras de su pantalón.

"Si no teneis ninguna duda... puedo dejar que os encargueis de todo. Tengo que preparar el Tigre Relámpago para salir mañana. Antes de salir contactaré con vosotros y os dare la información necesaria para que me hagais el ingreso."

 

Vorian asiente "Entendido. Ha sido un placer conocerte Doimo."