Spain FF Spain D6: "Space Riders": partida de rol online

(Por cierto, Vorian en los viajes siempre busca un rato para leer el "Libro de Oraciones para el Peregrino" que le dieron en Tellon Sendan)

 

Voy a la cabina de la nave, guardo en el ordenador las coordenadas del lugar, y hablo a los demás:
"¿Todos a bordo? Vamos a casa de Okaaru, entonces…"

Comienzo la maniobra de despegue, atento al comunicador por si el control aéreo nos llama la atención.

 

(Me queda un minuto de Internet >_<. Hasta las dos o tres de la tarde no podré conectarme.)

 

(He estado con poca o nula conectividad todo el día)

Minutos después, el Hyperion aterriza junto a la cabaña de Okaaru. Lucyn parece haberse tranquilizado y centrado, y agradece enormemente que no la llevéis de vuelta con Borvo. El viejo ermitaño, por su parte, tras prepararle a la chica un cuarto y dejar que por fin descanse y duerma, se despide de vosotros:

"Os deseo la mejor de las suertes. Estoy seguro de que nuestros caminos volverán a cruzarse: Y Vorian, espero que realmente encuentres a los Jedi que buscas. Recuderda mi ofrecimiento: te estaré esperando."

 

Tras dar gracias a Okaaru por todo y despedirme deseándoles a ambos que vaya todo bien, me interno en la nave, vigilando la puerta de la bodega donde se encuentra Rikkari (la pequeña de babor, donde no tenemos el compartimento oculto), con la pistola preparada con aturdidor y tratando de escuchar si le ha vuelto la consciencia. Cuando Vorian y Denith terminen de despedirse, les diré que vengan para abrir la puerta de la bodega. Va siendo hora de que tengamos una charla con el weequay…

 

Vorian se despide educadamente y busca a Jad. Cuando lo encuentra, desenfunda el bláster del nuevo cinturón que ha adquirido (el de Rikkari) y sonríe descaradamente "Vamos a asustar un poco a nuestro invitado" No ha puesto el arma en aturdir, pero sí que quita el seguro.

 

Denith les sigue... Crujiendose el cuello para calentar...

 

Apuntando al interior, abro la puerta de la bodega, y si Rikkari está consciente, dirijo el bláster a su cabeza y digo:
"Tienes cinco minutos para ofrecernos algo que nos suponga un beneficio suficiente como para no entregarte a Borvo."

 

Vorian entra en el interior, atento por si les está esperando una emboscada del prisionero. Si todo está en orden apuntará con el bláster a Rikkari de tal manera que queda descaradamente claro que es el bláster de Rikkari y que no está puesto el modo aturdidor como la última vez.

 

(Haced un control de Intimidación, depende de Percepción)

 

Miro fijamente a Rikkari esperando su reacción.

 

Su reacción es una sonrisa de medio lado.

"¿No tenéis ni un vaso de agua para un prisionero?"

 

Vorian se pone serio "Después de que contestes a nuestras preguntas"

 

"Cuatro minutos y medio."

 

"Cuatro minutos." Vorian le apoya el cañón del bláster en la frente.

 

El weequay endurece la mirada.

"¿Cuántos años tienes, niño? ¿Trece? Aparta ese juguete antes de que te hagas daño."

"Y tú, neimoidiano, si tuviera dinero como para pagar un rescate no estaría trabajando para Jabba. Así que vamos, disparad. Por suerte lleváis una nave con registros falsos, ¿verdad? Nada que temer de la venganza de un hutt."

Rikkari vuelve a sonreír de medio lado.

 

(El tipo tiene suerte de que Vorian quiera ser un jedi XD) Y ahora, seamos serios. Estamos fastidiados, no podemos perder credibilidad, así que...

Vorian sonríe de manera maligna, apunta el bláster a un parte de la nave que no resultará dañada por un disparo y abre fuego. Después acerca el cañón caliente del bláster a pocos centímetros de la cara del weequay. Vorian se inclina ligeramente hacia el prisionero y le susurra "Te necesitamos con vida para llevarte ante Borvo, pero no tienes que llegar entero" Guarda un pequeño silencio, deja de sonreír y se pone derecho. "Y ahora, deja de hacerte el tonto. No buscamos que nos des dinero. Como ha dicho mi compañero, queremos información, lo suficientemente valiosa como para no tener que entregarte a Borvo. Y más vale que nos digas algo si no quieres que te enseña una cosa que aprendí a hacer con unos amigos..." Vorian acerca un poco más el cañón del bláster a la mejilla del weequay para que note el calor.

 

Denith empieza a realizar una serie de calentamientos en la puerta... Hay que calentar bien antes....
Un par con la izquierda, otro con la derecha... Flexión lateral....

 

Levanto un arco superciliar ante los comentarios del weequay.

"¿En serio no tienes nada más a lo que recurrir que a estereotipos e insultos baratos? Que yo sepa el chico al que llamas "niño" acabó con uno de los geradda y alcanzó a uno de tus nikto. Y anda que si tuviera que haberme enfadado cada vez que un ignorante me confundía con neimoidiano estaríamos listos…

En cuanto a la venganza de un hutt, ¿supongo que te refieres a la del dueño de la nave que derribasteis? ¿O a la del que te encargó una misión en la que has fracasado? Debes saber que te necesitamos vivo… sólo hasta que le mande un mensaje a Borvo diciendo qué has hecho y que te tenemos cautivo, y nos diga qué quiere que hagamos contigo…"

 

"Geradda... ¡Ja! Lo raro es que no se maten solos. Cualquiera puede apretar un gatillo y cargarse a un matón de taberna. Y si me entregáis a Borvo y este me tortura con la delicadeza habitual y consigue que cante lo que sé (y os prometo que tengo muy poca resistencia al dolor), sabed que Jabba os va a poner en su punto de mira. ¿Vale vuestro pellejo la vida de un apuesto weequay como yo?"

El weequay bosteza.

"Admitid que no sabéis lo que estáis haciendo. Amenazas de violencia y cuentas atrás... ¡bah! Estáis hablando con un antiguo miembro de la banda de Ohnaka. Si queréis asustar a alguien de verdad tenéis que reducir la energía del bláster al mínimo y quemarle una mano centímetro cuadrado a centímetro cuadrado. En otras circunstancias os enseñaría cómo..."

Rikkari sopla al bláster como si quisiera apartarlo.

"Pero no hay por qué ser tan agresivos: somos camaradas después de todo, ¿eh? ¿Eh? Desde el principio esta historia me olió mal. No voy a jugarme el cuello por una tontería así, especialmente si realmente no hay ningún diamante-- y me inclino a creeros. Decidme qué queréis y dejadme ir. No parecéis el tipo de gente que suele tirar cadáveres por la borda, ¿hmm?"

 

"Dilo por ellos"

 

"Ah, por supuesto: más máquina que hombre, poco queda en él de..." *murmura algo ininteligible*

 

"Hmmmmmmmmmmmm"

 

"Mira… No nos interesa inmiscuirnos en líos entre los hutts. Borvo nos mandó a ver qué había ocurrido con su nave y traer de vuelta a los ocupantes si estuviesen vivos. Lo primero lo hemos logrado y sobre lo segundo… probablemente la tormenta haya acabado con todos o hace imposible encontrarlos. Así que tal vez podríamos ganarnos un dinero extra entregándole al responsable del desastre.

Supongo que el problema de la confesión podría evitarse si no te entregamos a él vivo, ¿no? A no ser que la próxima vez que tengas algo que ver con nosotros consideres el haberte dejado ir como hacerte un favor MUUUUUY gordo…"

 

"Quizás pase eso, quizás os conviertan en forraje. No, eso no va a pasar. Los hutts no son especialmente vengativos, ¿hmm? Pero en cualquier caso, ya te he dicho que os daré la información que deseéis malemplear. Esconde tus espolones."

Entrecierra los ojos y os mira lentamente.

"Ninguno tenéis pinta de fumar, ¿verdad?"