Spain FF Spain D6: "Space Riders": partida de rol online

Tras comprobar que no les ha sobrado ninguna pieza al volver a montar el hiperimpulsor en la revisión, le agradezco sinceramente a Ekayt el trabajo y, tras pagar lo acordado, nos preparamos para salir de la estación espacial.
"Aquí carguero Hyperion dispuesto a abandonar el puerto de atraque. Gracias por todo."

Cuando nos den el permiso de navegación, pongo rumbo hacia Naboo…

 

Jaan se sienta en la carlinga con vosotros tres en cuando dais el salto y pregunta:

"¿Así que a Naboo, eh? El planeta natal del Emperador. ¿No es un poco arriesgado?"

Mientras tanto, Uvecero enciende el tablero de dejarik educativo y se dispone a enseñarle a Maggie las reglas básicas del juego.

 

"¿Por qué piensas que es arriesgado?" Vorian pregunta sorprendido "Ya hemos estado una vez y no tuvimos ningún problema." Sonríe "De hecho, hicimos "amigos""

 

"¿No es un nido de imperiales? Sé que no vamos a la capital pero aún así... Bueno, imagino que vosotros lo sabréis mejor que yo. ¿Quién es ese Mallard al que vamos a ver?"

 

Dejo de contemplar los patrones cambiantes del hiperespacio para girarme hacia Jaan.
"Mallard es… un hombre de negocios, del tipo que no parece tener problemas con transacciones altamente ilegales en un mundo como éste. Espero que esta vez las cosas vayan de forma parecida a la anterior y no haya ningún lío…

Y de hecho hemos estado en el sistema Naboo ya un par de veces, sólo que la segunda no aterrizamos en el planeta sino en la guarida de un señor del crimen hutt en una de las lunas…"

 

Horas después el Hyperion vuelve a salir del hiperespacio sobre la espectacular vista de Naboo. El pacífico planeta brilla azul ante vosotros y a Jaan se le escapa un "Guau...". Una vez más la Estación Naboo con sus armas y sus cazas TIE os recuerda que os encontráis en el mundo natal del Emperador Palpatine, pero nada puede dañar la inmortal belleza del mundo que tenéis ante vosotros.

El holograma de la Reina Kylantha de Naboo aparece en el proyector de la carlinga, agradeciendo vuestra visita al planeta y recordándoos que la ley Imperial está en completo funcionamiento dentro del sistema. La información que el Hyperion tiene sobre losmúltiples espaciopuertos del sistema es inmediatamente actualizada y Control de Vuelo pronto os confirma una ruta de aproximación a vuestro destino.

El Hyperion se adentra en la capa de nubes del planeta y pronto surge sobre la costas de Spinnaker junto a un puñado de naves entrantes y salientes. Tras sobrevolar los tejados de teja verde de la bonita ciudad, pronto llegáis hasta las plataformas de aterrizaje. Jaan está alternativamente mirando las instantáneas que aparecen en la Guía y mirando por la ventana. Parece bastante ilusionada.

"Este lugar es precioso..."

 

Vorian mira divertido como Jaan disfruta de las hermosas vistas de Naboo. Tras contemplarla un rato en silencio, comenta "Si quieres, cuando terminemos el trabajo podemos ir a dar una vuelta turística. Me da la impresión de que quieres echar un vistazo a algunos lugares, ¿me equivoco?"

 

Jaan gira la cabeza hacia Vorian, arquea ligeramente una ceja y sonríe de medio lado:

"Me encantaría, pero sólo si me prometes que no vas a poner tu chaqueta encima de los charcos ni nada parecido,¿vale? Soy sólo una chica del Borde Exterior... y además ya tengo padre."

Guiña un ojo de manera casi imperceptible y vuelve a enfrascarse en la Guía del Navegante, aunque ahora sonríe ligeramente.

 

Vorian levanta una ceja y después se rie. Cuando termina, se pone serio y simula que se quita un sombrero mientras realiza una exagerada reverencia: "Se lo prometo señorita, pero me resultará difícil contenerme."

 

Riéndome por lo bajo, me levanto de mi asiento.
"Bueno, vayamos saliendo, que tras todas esas hermosas calles, paseos y plazas tenemos negocios que hacer…"

 

Jaan entorna los ojos y suelta una breve carcajada. A vuestro lado, Maggie intenta incorporar ligeramente a Denith, que se ha quedado completamente dormido (nada sorprendente tras lo agotador de las últimas semanas) para ponerle una almohada tras la cabeza pero se detiene cuando se da cuenta de que habéis tomado tierra.

El Hyperion ha aterrizado en una de las bonitas plataformas de aterrizaje de la ciudad, esta vez junto a la costa, bastante más cerca de la Plaza del Comercio. No tardáis mucho en llegar a la cantina donde conocisteis a Mallard la vez anterior.

 

Mientras miráis la puerta de entrada a la cantina con ojos vidriosos y mandíbula desencajada, el propio Mallard sale a la puerta y os hace un gesto para que entréis y os sentéis a su mesa. Esta vez no hay más que un guitarrista en el escenario tocando una melancólica melodía. La cantina está bastante más desierta que la última vez y no hay ni rastro de la hija de Corven.

Mallard está sentado en una mesa redonda bastante grande, aparentemente sólo para él. Sigue teniendo el mismo aspecto de noble de los Mundos del Núcleo que os llamó la atención la primera vez, y la misma seriedad e intensidad, y sigue yendo al grano de la misma manera.

"¿Cual es la mercancía?"

 

Vorian también va al grano y responde: "Es un núcleo de ordenador. De la época de las Guerras Clon, extremadamente sofisticado y potente. Parece ser que fue ilegalizado tras la caída de la Confederación." Vorian se detiene a pensar un momento y después mira a sus compañeros "Creo que eso es todo lo que sabemos ¿Me he olvidado de algo...?" Mientras Vorian espera una respuesta dice "Esto es una corazonada, pero debido a cómo era nuestro anterior "empleador" es probable que el contenido tenga algo que ver con droides."

 

Corven Mallard le sostiene la mirada a Vorian unos segundos:

"De acuerdo. Iré con uno de mis hombres a vuestra nave para que revise el objeto. A simple vista no parece algo que me pudiese interesar, pero quizá él me haga cambiar de opinión. ¿Os parece bien que nos pasemos dentro de media hora?".

 

Tras levantar un arco superciliar mirando a Vorian cuando éste da su explicación, me giro hacia Mallard para tratar de llamarle algo más la atención sobre la mercancía que le ofrecemos:
"Aunque mi compañero ha ido al grano dando la información básica de lo que traemos, creo que ha omitido algunos detalles relevantes… Supongo que conocerá las áreas de trabajo de Orion Howard y lo metido que estaba en la investigación sobre droides e inteligencia artificial. El núcleo de ordenador que transportamos parece ser una interesante pieza de tecnología confederada desarrollada durante la guerra o contener valiosa información sobre la misma." Me vuelvo algo más serio. "Y dada la clandestinidad de la operación con la que íbamos a entregárselo y la gran suma de dinero ofrecida por Howard sólo por su transporte seguro hasta el lugar indicado en la capital del Imperio, sospechamos que la tecnología podría tener aplicaciones desde en algún tipo de computación o inteligencia artificial novedosa hasta en armamento y militares…"

 

Mallard levanta la mano para detenerte:

"Me fiaré de la opinión de mi experto. No sé nada de computación ni tampoco de inteligencia artificial. Hablad con él de esas cosas."

Se levanta y os estrecha la mano a los dos, esta vez sonriendo levemente.

"Nos vemos en breve."

Y sale de la habitación.

 

CORTINILLA DE ESTRELLA


En el pequeño taller de la Hyperion estáis Jad y Vorian junto a Mallard y su experto, un humano de unos sesenta años tan serio como su jefe. El experto tiene una hidrollave de precisión con la que está abriendo la carcasa del núcleo de computación. Mallard le observa sin apenas pestañear. El experto retira la carcasa, se coloca unas hololentes y con una pequeña vara comienza a apartar componentes para echarles un vistazo.

"Hmmm. Esto lleva un buen golpe. Las placas de maniobra están partidas por la mitad."

Tras esto, vuelve a coger la hidrollave y s.aca un par de componentes.

"Parece un núcleo de control de droides reprogramable, probablemente geonosiano. Me recuerda al tipo de mente droide que iba instalada en las naves de control de droides de la Federación de Comercio. Aunque es un modelo bastante avanzado, quizás de finales de las Guerras Clon. Yo diría que es un prototipo o un panel de pruebas, porque dudo que esto viese producción en serie. Hmmmmm. No tiene autonomía. Es una versión incompleta. Le faltan muchísimas cosas... el cerebro droide para empezar, y eso es lo que realmente vale dinero..."

El experto comienza a montar el núcleo de nuevo y mira a Mallard mientras saca de su bolsillo una pequeña calculadora en la que comienza a hacer cálculos:

"Aún así es una pieza interesante. Algunos de los componentes del sistema remoto pueden alcanzar un buen precio en el mercado invisible."

El experto le ofrece a Mallard la calculadora, que la mira brevemente y responde:

"Os ofrecemos 25000 créditos por la carga. Al contado."

 

Vorian piensa unos segundos sobre la oferta y acepta: "Me parece una buena oferta" Vorian extiende la mano hacia Mallard y le comenta. "¿Necesita de nuestros servicios para algún trabajo?"

 

Mallard sonríe levemente de nuevo:

"Me temo que ahora mismo no. Están las cosas algo paradas con la llegada del año nuevo..."

Os dáis cuenta de que Mallard tiene razón: ¡faltan sólo dos días para la Fiesta de Año Nuevo!

 

Vorian asiente "Entonces supongo que será difícil encontrar otra encargo." Vorian suspira y después sonría al dirigirse a Mallars "Ha sido un placer hacer negocios con usted."

 

Poco después, Jad se encuentra en el Hyperion con el (de nuevo dormido) Denith, mientras Vorian acompaña a Jaan a dar una vuelta por el planeta. La muchacha es simpática y cordial, pero parece muy cauta en cuanto cree interpretar que Vorian quiere algo con ella, equivocada o no. Aún así es siempre cordial y los dos pasan una agradable tarde disfrutando del bello Naboo.

Los hombres de Mallard le entregan mientras tanto el dinero a Jad, 25000 créditos en credifichas, a cambio del núcleo de ordenador.

(Si no os vais a quedar a Nochevieja en Naboo, podéis realizar los controles de astrogración y desatraque. El coste de atraque en estos momentos es de 120 créditos por día)

 

Si no tenéis preferencia por pasar la nochevieja en un sitio u otro, Jad prefiere hacerlo en la Cantera del Contrabandista.

De modo que si no hay objeciones, Jaan no intenta vender el airspeeder aún, etcétera… procedo a pagar las tasas de atraque, envío un mensaje a Doimo diciendo que partimos hacia allí aunque es antes de lo previsto, informo a control de vuelo de mis intenciones de despegar, y cuando obtengo permiso pongo en marcha la nave dejando atrás el hermoso planeta entre el tráfico entrante de la gente que volverá a celebrar el fin de año con su familia.
Mientras tanto, realizo los cálculos de astronavegación…

EDIT: Compramos una máscara respiratoria extra, que hacen falta para entrar cómodamente en la Cantera y no tenemos para Jaan: 50 créditos según Star Wars sourcebook

 

Horas después,el Hyperion regresa al espacio real cerca de la estrella solitaria que la Cantera del Contrabandista orbita. La débil señal del planetoide aparece en vuestros sensores y emitís la contraseña numérica que aprendisteis de Rhett. La voz áspera del weequay del puesto de control responde tras comprobar vuestro transpondedor.

"Bienvenidos de vuelta, Hyperion. Creo que por aquí la gente tiene ganas de veros..."

El Hyperion desciende al interior del cráter y pronto llega a la estrecha caverna que hace de entrada a la Cantera.

(Jad, control de Pilotaje Naval)

 

Trato de dirigir la Hyperion con cuidado hacia la abertura para aterrizar, tras hablar a mis compañeros:
"Parece que se ha corrido bastante la voz… Espero que eso no signifique malas noticias…"

 

La Hyperion penetra en la amplia caverna tras un recorrido que parece interminable y se posa en la tosca plataforma de aterrizaje que le han indicado. Esta vez parece haber más naves posadas que la última vez: contáis diez cargueros ligeros aparte del vuestro, entre los que Jad distingue fácilmente la pintura amarilla del Tigre Relámpago, la nave de Doimo.

Pronto atravesáis el control de seguridad y os encontráis en la caverna principal (los weequay no dejan que los droides se queden en la nave, así que os veis forzados a llevarlos con vosotros).